La naturaleza evasiva y compleja del desarrollo socioeconómico, particularmente en el contexto cajamarquino, no conduce a repensar, reiniciar el chip del pensamiento y hacer un análisis mucho mas profundo sobre los principales obstáculos en la comunicación entre diferentes actores sociales.

A menudo, los gobiernos no logran articular una visión clara y compartida del desarrollo, lo que dificulta la implementación de políticas efectivas, las empresas pueden estar más interesadas en maximizar sus ganancias a corto plazo que en contribuir al desarrollo a largo plazo de la sociedad, los trabajadores pueden estar desorganizados o carecer de la capacidad de participar en la toma de decisiones que afectan sus vidas, las comunidades pueden ser excluidas de los procesos de desarrollo, lo que puede generar resentimiento y conflicto; estas dificultades en la comunicación impiden que se construya un consenso sobre los objetivos del desarrollo y las estrategias para alcanzarlos. Dejemos el prejuicio y miremos adelante, lo pasado ya sucedió, hay que remediar lo que se puede remediar, miremos con mayor atención lo que se formula como evidencia de los hechos, miremos a conciencia con la ciencia a nuestro servicio.

Lo analizamos:

Las personas necesitan poder comunicarse entre sí para compartir información, ideas y perspectivas. Esto es esencial para construir la confianza y la colaboración que son necesarias para el desarrollo.

La comunicación efectiva permite que las personas de diferentes grupos sociales participen en la toma de decisiones que afectan sus vidas. Esto ayuda a asegurar que los proyectos de desarrollo respondan a las necesidades y prioridades reales de las comunidades.

La comunicación efectiva puede ayudar a prevenir y resolver conflictos que pueden obstaculizar el desarrollo. Al permitir que las personas expresen sus preocupaciones y encuentren puntos en común, la comunicación puede ayudar a construir relaciones más pacíficas y justas.

En muchos casos, los proyectos de desarrollo se han implementado sin consultar adecuadamente a las comunidades afectadas. Esto ha llevado a la resistencia y el conflicto, ya que las comunidades sienten que sus necesidades y preocupaciones no han sido tomadas en cuenta.

La corrupción puede erosionar la confianza en las instituciones gubernamentales y dificultar la comunicación efectiva entre los diferentes actores sociales.

Los medios de comunicación a menudo están controlados por intereses poderosos, lo que puede limitar el flujo de información y la diversidad de voces en el debate público.

Para superar las dificultades en la comunicación y promover un desarrollo más efectivo, es necesario que:

Los gobiernos y las organizaciones de desarrollo deben hacer un esfuerzo concertado para involucrar a las comunidades en la toma de decisiones que afectan sus vidas. Esto puede hacerse a través de una variedad de mecanismos, como consultas públicas, audiencias públicas y comités de participación ciudadana.

Es importante que los gobiernos y las organizaciones de desarrollo sean transparentes y rindan cuentas de sus acciones. Esto ayudará a construir la confianza y facilitar la comunicación efectiva.

Un periodismo libre e independiente es esencial para garantizar el flujo de información y la diversidad de voces en el debate público.

La educación es fundamental para desarrollar las habilidades de comunicación y el pensamiento crítico que son necesarias para una ciudadanía activa.

De lo expuesto podemos concluir que:
El desarrollo se construye, no desde la participación aislada, no.
La sociedad en conjunto debe ser parte de la construcción afable, importa y mucho que en este esfuerzo sean los lideres, los que aún existen, sean quienes encaminen el trabajo colectivo en la búsqueda del acuerdo y la concreción del desarrollo, aún por pequeño que este parezca, se puede avanzar de a pocos y cada vez hacer más.

Comprender que, es imperativo entender que la sociedad somos todos, y todos debemos sentarnos a discutir las prioridades y lo que más importa para resolver las necesidades y demandas de la población; y comunicarlo de manera sostenida. Ya basta de poner la culpa sobre los hombros de unos cuantos para sacar provecho y sobreponer el interés particular sobre el interés colectivo; hay que juntar los roles y hacer más activa la participación de la Academia, de la Empresa, de los Gobiernos y la llamada “sociedad civil” (¿acaso no somos todos sociedad civil?)

Pretensiones prejuiciosas y arrogancia deben quedar fuera, ¡no sirven!, hay que escuchar todas las voces y luego de un análisis, basar las decisiones con evidencia científica, esa es la única forma de sentir que las cosas se hacen bien y sobre la ciencia, sólo Dios.

El autor es:

(*) Economista, Escritor, Periodista (ONU-DH), Maestro en Gestión de la Educación, Docente Universitario, Metodólogo, Planificador Estratégico, Director de Innovación y Transferencia Tecnológica en UNC.

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