Las carreras relacionadas con la tecnología y las ciencias ofrecen oportunidades emocionantes y salarios competitivos. Aquí tienes algunas opciones:
Ingeniería Informática: Diseño y desarrollo de software, sistemas y aplicaciones.
Ingeniería Electrónica: Diseño de circuitos electrónicos y dispositivos.
Ingeniería Mecánica: Diseño y fabricación de maquinaria y sistemas mecánicos.
Ciencia de Datos o Big Data: Análisis y procesamiento de grandes conjuntos de datos.
Biotecnología: Investigación y desarrollo de aplicaciones biológicas y médicas.
Telecomunicaciones: Diseño y gestión de redes de comunicación.
Robótica: Creación de robots y sistemas automatizados.
Física: Estudio de las leyes fundamentales del universo.
Química: Investigación y desarrollo de materiales y sustancias químicas.
Astrofísica: Exploración del cosmos y sus fenómenos.
Las carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) son fundamentales para el progreso y la innovación en el mundo actual. Sin embargo, existe una brecha de género en estas áreas. Comparto algunos datos interesantes:
Brecha de género en STEM:
Según la UNESCO, en 2019, solo el 35% de los estudiantes de STEM en educación superior eran mujeres a nivel mundial.
En América Latina y el Caribe, las mujeres representan menos del 30% de los investigadores en ciencia.
En matrícula de carreras STEM a nivel universitario, las mujeres representan solo el 34% en Argentina, el 25% en Chile, el 30% en Brasil y el 38% en México.
Fundación Ingeniosas:
En Chile, nació la Fundación Ingeniosas: Ciencia y Tecnología para Todas. Esta organización busca inspirar a niñas y jóvenes de entre 12 y 16 años en STEM.
Iniciativas gubernamentales:
A pesar de los desafíos, es importante seguir fomentando la participación femenina en estas áreas para lograr un futuro más equitativo y lleno de oportunidades.
En Perú, la matrícula en carreras STEM a nivel universitario muestra una brecha significativa entre hombres y mujeres. Según un informe de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (SUNEDU), mientras que solo el 27% de las mujeres se matricula en carreras de ingeniería y tecnología, un 71,2% lo hace en ciencias médicas y de la salud. Esta disparidad refleja la persistente brecha de género en STEM.
Para abordar esta desigualdad, es crucial comprender las causas subyacentes. Los prejuicios y estereotipos de género son factores clave. Desde la infancia, las niñas no siempre reciben la misma estimulación que los niños en campos relacionados con las ciencias. Además, la falta de representación de mujeres científicas en el mundo influye en las elecciones profesionales de las niñas y adolescentes.
Es fundamental que fomentemos el interés de las niñas y adolescentes en carreras STEM. Vivimos en un mundo donde necesitamos soluciones diversas para desafíos como la salud, el cambio climático y la igualdad de género. Al incluir a más mujeres en STEM, creamos productos que responden a las necesidades de toda la población y reducimos la brecha digital de género.