Perú, octubre de 2014

Apreciados lectores:

Resulta gratificante que el esfuerzo de producir una revista digital como ésta, sea compensado con el alto nivel de aceptación de quienes la leen, esto nos compromete a seguir produciéndola con total autonomía y por cierto esto no sería posible sin el aporte de nuestros colaboradores, especialistas y profesionales que sin interés pecuniario alguno, nos alcanzan, con entusiasmo, sus artículos y opiniones.

Como habremos notado, somos tres partes indivisibles para trascender en este difícil esfuerzo de compartir conocimiento, experiencias, trabajo, creatividad y como no, cariño; lectores, escritores y editor, para seguir compartiendo la revista digital FORO ECONÓMICO DEL PERÚ.

Gracias a todos ustedes.

Econ. Francisco Valdemar Chávez Alvarrán

Editor  Director

Si se anima a enviarnos un artículo de su autoría, escribanos a:

valdemarperu@gmail.com

Los artículos y opiniones que aparecen en esta revista, son exclusiva responsabilidad de sus autores.

LA POLÍTICA CAMBIARIA EN UN ESCENARIO DE CRISIS

Escriben:

Dr. Guillermo Aznarán Castillo  –  Director de la UPG – FCE – UNMSM.

Dr. J. Manuel Uriarte Guerra  –  Profesor  Investigador – FCE.

I.  LA MONEDA VEHÍCULO

Según Stiglitz (2000), “la moneda se define por las funciones que cumple”. Para el caso del dólar de los Estados Unidos de América, EE.UU.[1], sabemos que ésta moneda funciona: como medio de pago que facilita el comercio, como reserva de valor inmediato para un posterior intercambio y como medio que permite  medir los valores relativos de  los diferentes bienes y servicios. Es evidente que estas funciones también pueden ser  igualmente cumplidas por otras monedas (papel o metal) nacionales de países y  pueden ser emitidas y puestas en circulación por cualquier  institución – siempre  y cuando la misma sea reconocida y aceptada por los agentes económicos.

En este sentido, entonces, una primera pregunta  que nos formulamos es: ¿Por qué el dólar es la moneda  dominante y líder en la actual economía  globalizada? Antes de responder a esta pregunta se debe anotar que una moneda  nacional tiene  que estar ligada  mayormente a su propia economía doméstica real. En relación a ésta primera pregunta surge otra pregunta inevitable: ¿Cómo es posible  que el dólar siga líder en los  mercados de divisas internacionales cuando el gobierno federal de los EE.UU. que lo emite y respalda tiene el mismo un déficit  en su balanza de pagos superior al 40%  de su PNB[2] desde el año  2000? Éstas dos preguntas  devienen en más pertinentes y más clarificadoras si tenemos en cuenta  lo señalado por Linder-Pugel (1997): “El [actual] sistema monetario internacional en vigor desde [agosto de] 1973  podría también ser descrito como un no-sistema, [habida cuenta que] los países pueden escoger prácticamente cualquier política cambiaria [y divisas] que ellos deseen”.

   En efecto, los países ‘anclan’ sus monedas a cualquier moneda (fuerte) extranjera que les interese como reserva y como fuente de liquidez a través de inversión en portafolio (deuda) o para hacer pagos en el sector externo. Desde esta perspectiva y fin, el dólar es la moneda de uso preferente y altamente aceptado y es intercambiable entre los mercados emergentes y países en desarrollo. Por su lado, la moneda de la Unión Europea (EU), el euro, es adoptado por un número amplio de países africanos, mientras otros países prefieren  ‘anclar’ sus monedas nacionales a una canasta de divisas (Giudice, 2007).

El dólar junto al euro, a la libra esterlina y al yen japonés (también referidas como las monedas de los G4[3]), constituyen una canasta de monedas que el Fondo Monetario Internacional (FMI) usa para establecer y valorar sus Derechos Especiales de Giro (SDRs por sus siglas en inglés. Se debe notar que para efectos de pagos y créditos del FMI 1SDR=1.541140US$). La naturaleza de las monedas del G4 y su rol significativo en el mercado financiero global asegura que las políticas monetarias del quantitative easing (QE) emprendidas por los países G4 desde el inicio de la crisis financiera global –también llamada frecuentemente como la ‘Gran Recesión’ que se desató a fines de 2008 (y que aún persiste a la fecha), golpeando casi al final de la segunda administración del presidente de EE.UU. George H. Bush (2001-2008) –, tengan un impacto global a través del mundo interdependiente e interconectado.  (Tras el colapso de Lehman Bros. en New York en setiembre de 2008, el panorama económico mundial se deterioró.)

II.         EL DÓLAR CONFIABLE

             A las preguntas  antes mencionadas que estamos discutiendo podemos  avanzar algunas respuestas:

  • Los EE.UU. fue  el país occidental vencedor de la Segunda Guerra Mundial, además mantuvo  intacto su aparato  productivo, lo que le permitió  asegurar el 50% del PBI global de ese entonces.
  • El plan Marshall de reconstrucción y desarrollo de Europa, así como la explosión de la demanda, interna y externa, y el crédito se expresaron en dólares.
  • El incremento de la producción y el consumo en los EE.UU., creó  la necesidad de contar con reservas internacionales en dólares.
  • Los organismos  internacionales pertenecientes al sistema  de las Naciones Unidas utilizaron como unidad de cuenta al dólar.

Por su lado, las reservas globales en el año 2000 ascendían a siete billones de dólares, 71% de los cuales representaban al dólar y 17.5% al  euro. Para el año 2008, el dólar  representaba el 64%  y el euro el 26,1%. Como se observa comparativamente, la composición porcentual de las reservas monetarias muestra una reestructuración; el euro como reserva avanzó alrededor de siete puntos porcentuales, mientras que el dólar como moneda de reserva internacional registra un retroceso de cerca de un número igual de puntos, sobre todo entre los países en desarrollo y mercados emergentes quienes prefieren el establecimiento del valor de la moneda de reserva sobre la base de una canasta  de divisas.

En un estimado estadístico reciente del Banque de Reglements  Internationaux, BRI,[4] el peso relativo de las divisas en los activos internacionales era  del 41.5% en dólares, el 39.8% en euros, 7.7% en libras  esterlinas, el 3.4% en yenes  y el 7.6% en monedas de los BRICS (los llamados países emergentes de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, conocidos también como G5, por ser las economías con más transacciones financieras[5])  más un porcentaje determinado representado por el dólar de Hong Kong. Desde que empezó la política monetaria expansionista mediante los programas QE en EE.UU. y en otros países del G4 ha habido criticismos considerables contra las cuatro fases del QE por parte de las economías emergentes y países en desarrollo desde la erupción de la crisis financiera de 2008-Q3 en EE.UU.

Por otro lado, un dato adicional que demuestra  la fortaleza del dólar  en los mercados de capital es la relacionada  a la confianza que  le otorga  el sistema financiero internacional. En efecto, 60% de los actuales dólares circulantes se usan off-shore (fuera) de Estados Unidos de América (USA),  mientras que el 20% de los euros emitidos circulan off-shore de la eurozona (18 países europeos). Entonces, es de observarse que, desde 1973, no solamente el mercado financiero global se ha multiplicado por siete y  que el producto bruto interno (PBI) se ha multiplicado por dos desde el mismo año, sino que también han surgido y proliferado nuevos e innovadores instrumentos y productos financieros y que,  además, las deudas internacionales han crecido rápidamente y se han expresado  en dólares USA, mayormente.

III.          EL DÓLAR DEBILITADO: APARECE EL EURO

La canciller alemán Angela Merkel fue quien decretó la defunción del dólar como divisa hegemónica mundial. Aunque ella no ha señalado explícitamente que el dólar USA sería reemplazado por el euro, podemos descifrar sus intenciones, que, por lo demás, son asumidas  por Cohen (2001): “El euro  es también un vector  de ambiciones geoestratégicas,  cambia  la relación de fuerzas con el dólar, otorga a Europa una parte del derecho de seigniorage[6] de los Estados Unidos”. Sin embargo, Cohen  destaca o pone  algunos  límites a la predominancia  futura del euro, como se puntualiza a continuación:

En primer  lugar, Cohen considera al Banco Central Europeo, BCE, (con sede en Frankfurt, Alemania) como “un banco central independiente, confinado a la lucha contra la inflación, no coordinando su acción con los responsables de la política  fiscal”. En realidad  el BCE debe actuar  de acuerdo al Pacto de Estabilidad y Crecimiento adoptado en el Tratado de Maastricht (1992). Por este motivo, el BCE fija tasas de interés elevadas (alrededor del 5%) que buscan  contener  la inflación a pesar  de la recesión y marcado desempleo en Europa (alrededor de 0.5% de caída del PBI y 10% de desempleo).

En segundo lugar, Cohen señala que el BCE[7] en realidad reitera la política  monetaria del Bundesbank, la que se basa en la desconexión entre el ciclo económico y el ciclo político. En  otras palabras, la política  monetaria  responde al mercado y a los operadores  financieros,  aislándose, en consecuencia, de las  decisiones  de los gobiernos en materia de política  fiscal. Como se sabe, ésta última responde de facto a las necesidades de crecimiento de la economía y de empleo de sus electores.

En tercer  lugar, el mencionado Pacto de Estabilidad y Crecimiento se constituye en una verdadera camisa de fuerza para los hacedores de política  económica. Es decir, fija para  los miembros de la Unión Europea (UE) los siguientes indicadores macroeconómicos:

  • La tasa de inflación no debe ser  superior  en más de 1.5 puntos porcentuales a la media inflacionaria de los tres Estados  miembros  de la UE con menor inflación
  • Un tipo de cambio estable, sin devaluaciones por iniciativa propia (devaluaciones competitivas, o ‘guerra’ de tipo de cambio)
  • Un déficit público no superior al 3% del PBI (los Estados Unidos  no calificarían para este efecto)
  • Una deuda pública  inferior al 60% del PBI (en este caso los EE.UU. tampoco calificarían).

Por lo tanto, la zona euro presenta un tema teórico, respecto a saber si podríamos definirla realmente o no como una Área Monetaria Optima (AMO, o Optimum Currency Área como es conocida en el idioma inglés). Las premisas sobre las que se basa AMO son: economías  estrechamente vinculadas, movilidad de factores y un tipo de cambio fijo (Krugman, 2001). Aunque  con estas premisas  se dificulta el surgimiento de una moneda global única –inclusive si fuera una divisa de carácter bilateral, por ejemplo, UE-USA, UE-JAPON, USA-JAPON–, en el entendido que mediante el AMO se vincula  el grado  de integración  económica  entre el país que se une  y el área del tipo de cambio con las ganancias  y pérdidas del país con que se une.

Retomando el tema del euro, señalemos que en la denominada zona euro la política monetaria es operada por el BCE, mientras que la política fiscal  es  manejada por cada Estado en forma independiente; en consecuencia, el dólar tiene un Estado fuerte con un banco central (FED) autónomo para la gestión de las políticas monetaria y cambiaria y apoyo al crecimiento del PBI y empleo;  pero el euro  no tiene para sí un Estado. Por otro  lado,  el euro no es todavía plenamente una moneda que le permita ser un intermediario pleno entre monedas diferentes (vehicle  currency); en cambio,  el dólar  si posee  esa cualidad liderazgo, lo que determina que tenga un mayor posicionamiento (llámese seigniorage) en el mercado cambiario global y, también, entre los préstamos internacionales: 43% de éstos préstamos  son contratados  y negociados (en los mercados ‘spot’ y futuros) en  dólares y un 32.4% lo son en euros.

IV.       EL DÓLAR: MONEDA  SUB-PRIME

Empecemos  señalando que la economía  de EE.UU. es todavía la primera del mundo (representa el 25% del  PBI global), además, es el mayor  mercado para los bienes  y servicios producidos en todo el  mundo; algo más, América Latina y el Asia contratan y comercian con dólares, a lo que se agrega  que los países exportadores de petróleo, OPEC (Uriarte, 1987, capítulo 3) mantienen sus reservas monetarias  en dólares, así como las mismas economías emergentes BRICS.  Para  terminar, el título-valor más confiado, representativo de riesgo-país de las calificadoras internacionales de riesgo (e.g., Moody’s), más líquido, estable y demandado por corporaciones y gobiernos en términos globales es el Bono del Tesoro 30-años[8] emitido por la Secretaría del Tesoro de USA (30-year U.S. Treasury Bond) y, además, los bienes básicos y commodities se valoran en dólares. Estas son las razones por la hegemonía del dólar, son los argumentos por los cuales el ‘greenback’ (dólar) aún sigue siendo la moneda de la economía y finanzas globalizadas.

Ahora la pregunta es ¿El dólar está en camino de perder  su status  de moneda global? Presentamos a continuación algunas apreciaciones de carácter general:

En primer lugar, las pérdidas de valor del dólar respecto a las otras monedas en el mercado global de cambios afecta significativamente a los mismos inversionistas, países y otros poseedores  de reservas en dólares; de allí entonces  su interés de que el dólar no caiga de dólar en el mercado (Spot y Future) del tipo de cambio (Exchange Houses); por otro lado, en el mundo hay actualmente US$5.7 billones en reservas en los bancos centrales expresadas en dólares, habiéndose triplicado su valor en una década[9]. De dicho monto, entre China y Japón, ambos países poseen US$2.5 billones lo que determina la existencia de una enorme  sensibilidad en las relaciones económicas-financieras y políticas entre los EE.UU. y aquellos países  acreedores que poseen acreencias contra USA (China, por ejemplo) y son poseedores de enormes reservas  en dólares.

En segundo lugar, los EE.UU. está creciendo en el 2013-2014 en forma muy lenta, menos de su potencial esperado; está añadiendo a su economía productiva alrededor de 70,000 trabajadores al mes, muy por debajo de su potencial y capacidad de cerca de 160,000 empleos mensuales en épocas de expansión (1993-2000). Su crecimiento en el trimestre julio-setiembre  2008, por ejemplo, mostró una clara y leve  recesión; su crecimiento fue de apenas 0.2%. Sus proyecciones en ése entonces no eran alentadoras, pese a que la  tasa de interés  referencial de la Fed ha venido reduciéndose progresivamente hasta menos del 1%, lo que  nos indica  los límites que tiene  la política monetaria para reactivar la economía. Esta situación se venía agravando desde y durante la crisis financiera que empezó en 2008-QIII en un mercado  intoxicado  de créditos y bonos hipotecarios subprimes (SMBs), con bancos comerciales trasnacionales y locales escasos de liquidez, con bancos de inversión quebrando, con empresarios reacios a emprender nuevos negocios y aumentar la inversión privada, y  con consumidores sin confianza en las política económicas del gobierno y que ya habían agotado sus líneas de crédito para el consumo y estaba sobre endeudados mediante el uso del crédito de plástico.

En tercer lugar, es de notar entonces que el  dólar en tanto sea considerado y reconocido como vehicle currency (moneda vehículo), actúa  como un facilitador  del comercio por el hecho de que los precios y las transacciones se hacen en dólares, dejándose así de lado las monedas de los países involucrados en la transacción. Por lo contrario, los ejemplos  de operaciones  de comercio directo o trueque  (bienes básicos  por  bienes industriales) son muy escasos, así como  también es  inusual  el acuerdo bilateral adoptado por Brasil y Argentina para  comerciar sus bienes y servicios en sus propias monedas (el real y el peso argentino)[10].

En cuarto lugar,  en reemplazo  del dólar ocuparían  su lugar el yuan chino o el euro. La moneda  europea  podría  serlo en un mediano plazo, mientras que el yuan chino lo sería en el largo plazo en la medida que la China se convierta en la gran potencia  económica de Siglo XXI.

Sin embargo, el dólar continua con su función  de reserva monetaria global y como fondo de liquidez global, pues pese  a los sombríos pronósticos de la economía  de los EE.UU., el dólar al año 2014 se ha recuperado, en comparación  a todas las monedas duras,  incluyendo el euro (Slater–S.NG., 2008), del pico de US$1.59 por euro en julio 2008 a US$1.40 por euro en octubre  2008, y, finalmente, a US$1.25 dólares  en noviembre  2008 (ver Cuadro 1 siguiente). Esto se debe a que las deudas  de la banca   y empresas  se expresan  en dólares, por lo que los agentes demandan  dólares, de tal manera que la reserva federal de EE.UU. (la Fed) ha extendido  sus  líneas de canje con otros bancos centrales de la economía global, convirtiéndose  en el “prestamista de última  instancia” (lender of last resort) de la liquidez global  por un monto hasta ahora de 620,000 millones de dólares

V.  EL DÓLAR Y LA  CRISIS DE EXPECTATIVAS

             Hagamos un poco de historia. El dólar se cotizaba hace ocho años en alrededor de 3.60 nuevos soles, y aún a ese precio o tipo de cambio muchas familias y empresas tomaron préstamos en dólares, en consecuencia, ellos fueron los beneficiados directos de la apreciación de la moneda nacional. Como nunca antes visto en el mercado cambiario peruano, estos agentes económicos son los que se ponen nerviosos y alertas ante un ascenso (‘hipo’) cambiario que lleva el precio de la divisa nacional hasta un pico de 2.782 soles el 21 de julio de 2014.

Un aspecto a resaltar es que las exportaciones doblaron su monto en el período de mayor apreciación del sol, lo que contraviene la teoría económica que plantea que la moneda nacional debe depreciarse para estimular las exportaciones, es decir, se argumenta que debe alcanzarse la competitividad  global abaratando artificialmente el precio de la oferta exportable. Esta depreciación es lo que se denomina  “devaluación competitiva”; sin embargo, en nuestro país las exportaciones se multiplicaron con un dólar barato. Entonces, hagámonos la siguiente pregunta: ¿A qué se debe esta contradicción de la teoría económica del sector externo?

En primer lugar, la diferenciación de calidad de nuestros productos  coincidieron con las megas tendencias del consumo global, tales como, la alimentación saludable,  productos orgánicos,  medicina alternativa, proteínas vegetales, entre otras tendencias. En segundo lugar, a este escenario favorable  se agregaron los precios finales de compra de nuestros principales productos mineros. En ambos casos, con  la diferenciación de productos  no tradicionales y el alza  de los precios de los bienes primarios, la  competitividad  global  que se logró fue sin mejorar significativamente  la eficiencia en los procesos productivos.

Para ilustrar un poco más, tomemos por ejemplo el caso de los metales. Es evidente que una competitividad global alcanzada en condiciones de alza de precios no es sostenible en el tiempo si cambian los factores favorables  del macro entorno global, en especial en lo que respecta a la demanda de los principales  bienes primarios de exportación; por ejemplo, el precio del cobre desciende de $4.0 la libra un precio cercano a los $3.27 la libra, mientras que el oro spot cae de un pico de 1,800 dólares hasta  un precio  actual de alrededor de los 1,325 dólares la onza troy. Pero hay que señalar que en estos dos casos los márgenes de rentabilidad todavía son muy  competitivos,  teniendo en cuenta que el costo de producción de la libra de cobre para Southern Copper Corp.  es de 1 dólar y el costo de producción de una onza troy de oro para la compañía Yanacocha en Cajamarca, Perú, es de US$400. Igualmente debemos precisar que la exportación basada en la diferenciación del output se ha desacelerado  pero resiste de la mejor manera a las dificultades de la demanda. 

Entonces ¿Cuál es la respuesta al problema que hemos venido dilucidando mediante los argumentos expuestos en la presente discusión? A fin de ser directos y abordar la pregunta concretamente se puede decir que la crisis se engendra porque existe y persiste una crisis de expectativas empresariales. Al parecer, los empresarios-inversionistas pretenden sostener un alta una rentabilidad o margen de utilidad anual mayores al 25%  en sus proyectos de inversión en la industria —y “hasta 40% en las empresas mineras”[11]— cuando en Wall Street en Nueva York, este margen de ganancia o tasa de rendimiento esperada alcanza el 12% o 15% que es el ‘promedio mundial’. No sólo nos referimos a los empresarios exportadores de bienes primarios y a aquellos dedicados al desarrollo de la infraestructura nacional (la brecha de la infraestructura nacional alcanza a la astronómica figura del US$93,000 millones, y la inversión pública tan sólo puede cubrir un monto de US$10,000 millones al año[12]), sino que el análisis puesto también alcanza a las empresas financieras  y bancarias del sistema financiero nacional del país.

Por otro lado, y para acabar esta sección, si analizamos la estructura de la demanda interna, la pregunta que uno debe plantearse debe ser: ¿Qué se desacelera más, la inversión o el consumo?  La respuesta la formula el mismo presidente de la CONFIEP cuando dice que “es la hora de la inversión”, sugiriendo además a manera de consideración que  la “política económica debe enfocarse a quebrar las expectativas negativas de los empresarios, sobre todo la de los [empresarios] nacionales”.

VI.  LA FED REACCIONA

No hay duda que la política monetaria internacional la decide y la  gerencia la Reserva Federal de los Estados Unidos de América, más conocida como la Fed, con sede en Washington, D.C. Veamos los hechos en cuatro capítulos y un epílogo a continuación:

             Primer capítulo: Ben Bernanke, presidente de la Fed hasta el 31 de enero de 2014 desde agosto de 2006, sugiere, en mayo de 2013,  a través de una conferencia de prensa en persona ante los medios de comunicación escrita y de televisión—por lo tanto, no oficialmente—que se está “estudiando” en la FOMC la pertinencia de ‘reducir gradualmente la compra de activos[13] (tapering) en el programa QE, es decir, reducir las inyecciones de liquidez o expansión monetaria de US$85 billones mensuales a la economía de EE.UU., en atención a las debilidades de los mercados laborales y de vivienda, baja confianza del consumidor y en apoyo del saneamiento del sistema financiero y de las finanzas públicas.[14]

             Segundo capítulo: acto seguido del tapering, las bolsas de valores de todo el mundo se agitan[15], los tipos de cambio de todas la monedas varían favoreciendo al dólar[16], el crédito se restringe y se encarece en el resto del mundo; asimismo, los capitales extranjeros salen de los países emergentes y de los menos desarrollados y se refugian en los mercados de capitales supuestamente más seguros, en los cuales se han elevados las tasas de interés. Los países emergentes con más altos ingresos tendieron a pasarla peor que el resto de ellos a consecuencia del tapering anunciado por Bernanke. Una posible explicación de dicho comportamiento es que los inversionistas en dichos países mantuvieron sus activos en los sistemas financieros de los acotados países y que los financistas que buscaban rebalancear sus portafolios tenían fondos en estas economías sin ataduras y a corto plazo, para retirarlos oportunamente. Por otro lado, se puede decir que los países emergentes con tenían políticas fiscales y monetarias creíbles les fue mejor.

             Tercer capítulo: el anuncio del taper de mayo de 2013 de  Bernanke no se hace realidad; para algunos el tapering se ha postergado hasta diciembre de 2013, mientras que para otros se ha postergado indefinidamente. Lo cierto es que los que apostaron por el alza de las tasas de interés y del precio del dólar, además de  la fuga masiva de capitales, han quedado en off-side[17]. Claro está que en este capítulo de todas maneras sedan cambios en el escenario global, tanto por la desaceleración del PBI de los llamados BRICS y otras economías emergentes y en desarrollo, como también una leve pero lenta recuperación económica de los EE.UU., la UE y el Japón.

             Cuarto capítulo: tenemos nuevamente el protagonismo de la Fed, Bernanke dejará sus cargo a principios del año 2014 sin haber resuelto el enigma que el mismo produjo acerca del fin de la era de la liquidez fácil y barata, pues ya tiene reemplazo en el cargo; se trata de su vicepresidente en la Fed, la economista Janet Yellen, conocida como una siempre entusiasta del impulso monetario a-la-Bernanke ejecutado por su institución, pero con una posición menos expansionista del dinero, la misma que se condice con la misión de la Fed, cuyos  objetivos institucionales son tanto la estabilidad monetaria como el pleno empleo.

             Epílogo: las respuestas más cruciales sobre la crisis están pendientes, sobre todo respecto a la orientación que seguirá la Fed en los próximos meses, teniendo en cuenta dos hechos trascendentales: el agravamiento de  los problemas fiscales del gobierno federal que hacen peligrar la leve recuperación de la economía, a lo que se agrega la inminente recomposición de la mayoría de los miembros del poderoso Comité Federal de Mercado Abierto, FOMC, responsable de las decisivas operaciones del “open market”.

VII.  LA GUERRA DE LAS DIVISAS

Pocos lo admiten, pero esta guerra de divisas está sucediendo desde el 2008. En efecto, desde que empezó la primera crisis del siglo XXI, fueron las economías del sudeste asiático (newly industrialized countries, NICs) las que procesaron persistentes minidevaluaciones para mantener su nivel competitivo en el comercio global. Sin embargo, éste fenómeno no se hizo visible a nivel global hasta que la China y Japón decidieran tener sus monedas depreciadas. En el caso chino para continuar su expansión, mientras que en el caso japonés para tratar de romper el estancamiento productivo de su economía que duraba más de una década (la de los años 1990).

             Es evidente entonces que esta opción de devaluar su moneda para ganar o mantener competitividad en el comercio global no es nueva; es más, respetables economistas, como Krugman y Roubini, plantean lo mismo para el caso de la reciente crisis fiscal y de deuda griega. Es decir, que Grecia y otros países se separen de la zona euro, retomen su antigua moneda (el Dracma), recuperen así su soberanía monetaria; y todo esto con el fin de poder devaluar para reactivar su economía y pagar sus deudas.

             Esta política monetaria proactiva de algunos bancos centrales del hemisferio norte está presente cuando inundan con liquidez el mercado, a través de facilidades o estímulos que no son más que  el financiamiento de  las deudas que han asumido los bancos con problemas de activos tóxicos (subprimed mortgages), o Estados con gran insolvencia. Lo cierto es que los bancos centrales están solucionando las pérdidas públicas y aquellas de la banca privada. En consecuencia, la creciente cantidad de monedas de los países europeos y de los EE.UU. están reduciendo su valor en el mercado internacional de divisas.

             Ahora bien, veamos cuáles son los efectos sobre las economías emergentes y en desarrollo como resultado de una guerra de divisas. En primer lugar, estos mercados se encuentran invadidos por enormes volúmenes de efectivo que buscan una alta rentabilidad, ya sea vía inversión directa o de portafolio e inclusive aprovechando, con masivos dineros especulativos, los diferenciales entre las tasas de interés domésticas y extranjeras. Este masivo flujo de capitales a través de los mercados internacionales de capital y fondos de riesgo (hedge funds) crea indubitablemente una persistente inestabilidad y volatilidad en los mercados financieros globales.

             En segundo lugar, resulta contradictorio que sean justamente los países que más han depreciado su moneda, en especial los EE.UU., quienes ahora claman por evitar la llamada “guerra de las divisas”, la misma que sucede cuando algunos países programan devaluaciones competitivas de su moneda, con el fin de reactivar su economía a través de exportar mercancías más baratas; consecuentemente, aquella pretendida ‘guerra monetaria’ en realidad  es una verdadera guerra comercial con el propósito de preservar o incrementar mercados.

             Por lo tanto, son afectados países como los cuatro países de la “Alianza del Pacífico” (México, Colombia, Perú y Chile), quienes se han visto invadidos de divisas baratas (dólares, euros…), por lo que sus propias monedas nacionales se  aprecian, restándoles competitividad comercial; además, aquellas divisas ‘baratas’ llegan por períodos cortos (como monedas o capital golondrino) para aprovecharse convenientemente del rendimiento de las altas tasas de interés domésticas. El marcado diferencial de las tasas de interés en el mercado local favorece al “capital golondrino” (Uriarte, 1996)[18].

             Una última pregunta que nos debemos plantear antes de terminar la presente discusión es: ¿Qué se está haciendo para contrarrestar las devaluaciones competitivas en las economías globales?

                Existen varias medidas que se pueden adoptar para responder esta interrogante. Por ejemplo, la respuesta se encuentra en: adelantar pago de deuda externa (aunque los prepagos en el ámbito financiero siempre acarrean una penalidad contractual a favor del acreedor); encarecer el costo de oportunidad del capital y del crédito en moneda extranjera (hoy en el Perú el costo de endeudamiento en moneda extranjera (US$) y las tasas pasivas son menores en el largo plazo que en moneda nacional; permitir que los fondos de pensiones inviertan un mayor porcentaje de sus captaciones en plazas del exterior (estas inversiones internacionales en fondos mutuos y bolsas también se pueden viabilizar mediante bancos de inversión en fondos internacionales de diferentes grados de riesgo y objetivos, lo que permite al participante la diversificación del portafolio de inversiones y el acceso a las economías de mayor potencial de crecimiento en el mundo); adquirir grandes volúmenes de moneda extranjera para luego esterilizarlos con operaciones de mercado abierto (hechos que nos pone en el ámbito de las actividades altamente riesgosas de los hedge funds y especuladores en los mercados efectivo y futuros).

             A primera vista, todas estas opciones nos parecen bien. Pero falta una perspectiva estratégica de utilización de los excedentes en reservas internacionales (RIN), que considere la creación de un fondo de inversión, que pueda utilizar responsable y efectivamente las divisas del banco central para   importar tecnología de punta de última generación, para mejorar y cerrar la brecha de la infraestructura física del país[19] y para elevar la calidad del capital humano.

VIII.  CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES

1.  Una moneda,  para ser considerada  de carácter global, debe servir de reserva, de fondo de liquidez y como vehicle currency. Por el momento  el dólar es la única moneda  que posee  éstas tres propiedades.

2.  El euro, en el corto plazo, y el yuan chino, en el largo plazo, son las monedas  que podrían competir con el dólar por la hegemonía  en el mercado financiero  y en el de divisas a nivel global.

3. Si las deudas externas, públicas y privadas, los pagos internacionales, el comercio exterior, los principales títulos-valores, los bienes  básicos y las reservas, continúan expresándose en dólares, entonces la divisa norteamericana  continuará  siendo la moneda de la globalización  económica.

4. Serán la persistencia de los déficits externos y fiscales de EE.UU., además de un prolongado estancamiento productivo, son los que podrían poner en cuestionamiento la posición futura del dólar, en favor del euro o el yuan.

5.  Es conveniente para el Perú mantener por el momento sus reservas en oro físico (30 %), en dólares (20%), en euros (20 %), en yuanes (20 %), y un 10 % en libras esterlinas y yenes del Japón.

6.  Posteriormente, a resultas del éxito del Perú en su Tratado de Libre Comercio, TLC, con China, además de sus inversiones, se acumularán progresivamente reservas peruanas en yuanes chinos. Lo mismo se podría señalar respecto a los futuros TLCs con otros países  y las inversiones de los países asiáticos y de los BRICS en el Perú.

7.Las tasas de interés globales probablemente van a subir paulatinamente, de manera que este ajuste de política anticíclica hacia arriba resultará probablemente en la reducción de las corrientes de capital de los países con abundancia de capitales, monto que podría alcanzar a menos del uno por ciento del PBI global de las economías emergentes durante el trienio 2014-2016. Sin embargo, es posible que el ajuste de las tasas de interés monetarias sea bastante radical, dependiendo ello del grado de confianza de los consumidores e inversionistas y, sobre todo, del nivel de empleo global y demandas del mercado laboral.

8. El ‘taper’ del QE (y sus efectos sobre las tasas de interés a largo plazo en EE.UU. y otros países del G4) se asume en este análisis que siga una trayectoria relativamente ordenada, sin sobresaltos, y lenta. Si el ‘tapering’ es impulsado u orientado a un ajuste del mercado en forma abrupta, entonces las corrientes de capital hacia los países en desarrollo y mercados emergentes podrían debilitarse agudamente, lo que contribuiría a poner stress sobre las economías emergentes vulnerables.

9. En un escenario dado, ceteris paribus, donde las tasas de interés escalan rápidamente en zancos de 100 puntos base, los flujos de entradas de capital de las economías emergentes y en desarrollo podrían contraerse hasta en un 50% por varios trimestres.

BIBLIOGRAFIA

1.  J. STIGLITZ  (2000). Principes d´economie moderne. Bruxelles: Edtl. de Boeck.

2.  P.LINDER – T.PUGEL (1997). Economie Internationale. Paris: Edtl. Econômica.

3. DOCUMENTATION FRANCAISE (2008). Problemes economiques, N° 2954, Paris.

4. J. SLATER – S.NG. (2008). “El apetito de dólares de los bancos levanta la divisa”.

    Diario El Comercio, Wall Street Journal Las Américas, Lima.

5. E. COHEN (2001). L´ordre economique mundial. Paris: Edtl. Fayard,

6. ALTERNATIVES ECONOMIQUES (2007). Oú va la finance internationale, N° 72, Paris.

7. THE ECONOMIST (2007). “Losing faith in the greenback”, Londres, http://www.theeconomist.com.

8. P. KRUGMAN-M.OBSTFELD (2001). Economía Internacional. Madrid: .Addison-Wesley.

9. V. GIUDICE (2007). Teoría Monetaria Internacional 100 Lecturas, CD, Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lima.

10. M. URIARTE (1996). El Efecto Tequila y los Mercados Emergentes de Capitales en América Latina.  Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Facultad de Economía, Unidad de Post Grado, Lima, Perú. Capítulo II.

11. M. URIARTE (1987). Transnational Banks and the Dynamics of the Peruvian Foreign Debt and Inflation (“Los Bancos Transnacionales y Dinámica de la Deuda Externa y del Proceso Inflacionario en el Perú”).  Nueva York: Editorial Praeger Publishers. Capítulo 3.

12. WORLD BANK (2014). Global Economic Projects. Vol. 8, enero 2014. Washing-ton, DC. https://openknowledge.worldbank.org/handle/10986/16572/.

FORMANDO AL DIPLOMATICO DEL SIGLO 21

Escribe: Mag. César Huamanchumo Plasencia. 25 Enero

Luego del pitazo final de La Haya, la política exterior de Perú habrá de enfilar su habilidad diplomática hacia tópicos con más sustancia económica que impacten en el bienestar nacional. Con 17 TLC en vigencia, el país muestra un vigoroso 50% como grado de apertura comercial, con ingresos incrementales año a año en divisas por turismo e inversión extranjera. Acelerando el compás integracionista, se viene participando con mucho ímpetu en la Alianza del Pacífico (octava economía del mundo según talla del PBI), que acaba de liberar 92%  del comercio intrarregional de bienes y servicios. También  se negocia en el aún polémico Trans Pacific Partnership (TPP) y alista lapiceras para suscribir TLCs con Turquía, Rusia e India. Según probaron Bhagwati, Lawrence y otros economistas, el free market equivale a un chip acelerador del crecimiento económico que Perú contiene inside.

El Prof. Moomaw arguye que la diplomacia comenzó con simples reuniones entre emisarios para discutir “próximos pasos” entre tribus, estados e imperios. Hoy, la diplomacia ya no es tan sencilla. Ha evolucionado en su saber y tiene a cargo un conjunto cada vez más amplio de asuntos complejos que los estados enfrentan en la comunidad mundial. La “New Diplomacy” lidia con temas tan diversos como Derechos Humanos, Medio Ambiente, Corrupción, Tecnología, Terrorismo, Comercio, Globalización y afines. Las crisis recurrentes y la permanente disputa de hegemonía entre  naciones y empresas suscitan la aparición de nuevos actores con peso internacional abordando los fueros, antaño exclusivos de la diplomacia. (“New Diplomacy”. Discussion Paper. William R. Moomaw. Center for International Environment and Resource Policy. The Fletcher School.Tufts University).

Moomaw indica que el mundo todavía no sabe en definitiva como gestionar una “New Diplomacy” y propone que aquella debe actuar como “Diplomacia para el Desarrollo Sostenible”, atendiendo  los rubros de orden económico, social y ambiental, ayudando a crear sociedades que satisfagan las necesidades de su población. Recalca, además, que la globalización no sólo toca la economía. Comprende una gama de  hot issues entre ellos la equidad, el impacto de la explotación de los recursos en el medio ambiente, salud y bienestar de los trabajadores. Abarca también información, conocimiento y ciencia. Asimismo, ofrece links e interfaces con corporaciones privadas y ONGs que cruzan las fronteras nacionales ejecutando funciones donde gobiernos y sus agencias no suelen hincar el diente.

Esta troika de actores en acción sirve de base para postular la existencia de una “Triplomacy”, a ser implementada con especialistas que  emplean una “triple lente” la cual les provee visión de amplio rango, útil en cerrar alianzas y equipos multidisciplinarios trabajando con elevada eficacia (“Why Triplomacy is the New Diplomacy”. Deborah Winslow Nutter. Senior Associate Dean at The Fletcher School. Tufts University).

Crecientemente los negocios nutren de pragmatismo la relación entre estados. En este Siglo de Negocios y Emprendimientos Globales se registran 575 Acuerdos de Integración Regional notificados y 379 en ejecución  (www.wto.org) que, convalecientes por la crisis del 2008, tratan de expandir el ritmo del comercio. El derrumbe de aranceles y papeleos  aduaneros ha creado un vasto freeway para negocios planetarios, los cuales son defendidos por los respectivos gobiernos. CEO´s y gremios empresariales posibilitan no sólo el intercambio mundial sino también hacen  defensoría permanente de sus transacciones, para lo cual efectúan lobby ante gobiernos y autoridades de otros países, configurando una agresiva Diplomacia Pública en auge, tal como  Edmund Gullion previera en 1965.

No extraña por eso que, dentro de “Los Diez Intereses de Política Exterior de Chile” fijados por el Ministerio de Relaciones Exteriores (www.minrel.gob.cl), el N°1 afirme “Promover los intereses económicos de Chile y la asociación comercial con otros países”, en tanto el N° 2 señala “Contribuir al fortalecimiento de la integración regional”. Brasil coincide con la tesis anterior. Dentro de sus funciones, el Ministerio de Relaciones Exteriores (www.itamaraty.gov.br) señala en el ítem 2. “Proponer al Presidente de la República líneas de actuación en la conducción de negocios extranjeros”. Agrega en el punto 5. “Administrar las relaciones políticas, económicas, jurídicas, comerciales, culturales, científicas, técnicas e tecnológicas de Brasil con la sociedad internacional”. En mucho, la diplomacia actual se enmarca con fuerte matiz dentro de la célebre máxima de Charles De Gaulle que “los países no tienen amigos sino intereses”.

Importante remarcar el consenso sobre el paradigma que el binomio tecnología-innovación continuará irradiando positiva influencia en los esfuerzos de los países emergentes hacia el desarrollo. Desde 1992 la ONU cuenta en su organigrama con la Commission on Science and Technology for Development (CSTD), la cual cumple el mandato de proporcionar asistencia de alto nivel al Consejo Económico y Social (ECOSOC), en la formulación de  políticas y programas hacia la Sociedad del Conocimiento.

Precisamente en una Resolución sobre Ciencia y Tecnología para el Desarrollo de su 16° Reunión (3-7 Junio del 2013), la CSTD enunció, entre otros acápites “… que los hacedores de políticas debieran estar alertas al avance de la innovación, identificando oportunidades hacia el desarrollo de sus países, atendiendo especialmente las tendencias y posibilidades de progreso para el desarrollo local,  pequeñas empresas, emprendedores y personas individuales…” Declarado país de renta media alta, Perú ha perdido el estatus exclusivo de beneficiario de ayuda financiera extranjera. Por tanto, debe priorizar la captación de cooperación científica y tecnológica.

Cancillería entonces tiene que virar su gestión en allegar conocimiento e innovación reconocidos como key factors del progreso, tal como lo hace Itamaraty desde hace décadas. En Perú resulta crucial mejorar la gestión negociadora en atraer inversión extranjera directa (IED) sobretodo la llamada “greenfield” destinada a financiar la manufactura de bienes exportables con alto input tecnológico, propiciando la Competitividad Productiva y el Cambio de la Matriz Exportadora. Si no se aplica al menos 25% anual de inversión privada, será difícil que el PBI crezca al 6%, requerido para llegar al 2021 ondeando competitividad e inclusión. Con escaso presupuesto en tecnología (0.1% del PBI según cifras al 2012), el árbol de I+D+i será ralo y no hará sombra para cobijar esperanzas de un  mejor mañana.

Cancillería ha perdido influencia en promoción de exportaciones, luego que las Oficinas Comerciales fueran transferidas a Mincetur. Es imperativo que Torre Tagle salte de la pasividad a la resilencia y, asimilando los desafíos del Siglo 21, diseñe un Plan de Promoción Económica Exterior todavía ausente en el ROF sectorial. Será apropiado  que en el actual proceso de reestructuración el Ministerio de RR EE potencie su  tonicidad institucional a fin que pueda conducir una smart strategy en el fieramente competitivo Siglo 21 construyendo escenarios futuribles de la Agenda Global.

Por su lado, la Academia Diplomática del Perú (ADP) habrá de afinar su tunning con los desafíos del Mañana actualizando su malla curricular incluyendo sólida preparación en prospectiva, inversión, promoción de negocios, economía, transferencia tecnológica, comercio, innovación. Renovar periódicamente la plana docente es un must, convocando personalidades y expertos con dominio de los trends globales. Dotar a la ADP de nivel académico world-class y posicionarla como la mejor de la Región en su campo deviene compatible con vigorizar la musculatura institucional de Torre Tagle que es, en rigor, la primera y mayor transnacional de Perú cuyo aporte al desarrollo seguirá siendo estratégicamente invaluable.

APEC, la Alianza del Pacífico y el Acuerdo Transpacífico (si se aprueba con transparencia) constituyen alianzas multilaterales donde una nueva generación de diplomáticos peruanos habrá de batallar en pos de ampliar las oportunidades en comercio e inversión, acelerando la travesía hacia un smart growth con igualdad distributiva. El reto ineludible consiste en perfilar una moderna política de promoción económica exterior con alto contenido prospectivo, como nave madrina de Perú  en las turbulentas corrientes de los Global Business en sus variantes de e-commerce, trade by tasks, offshore, etc., insertando competitivamente a las mipymes en las Global Value Chains.

La actual Unión Europea germinó en un surco trazado por los preclaros Monnet y Schuman quienes con fina percepción futurista crearon la Comunidad del Carbón y Acero, columna de macizo pragmatismo a la cual se añadieron otros proyectos comunitarios con beneficios tangibles para los países asociados. El ideal visionario de ambos precursores debiera inspirar la generación de una Nuevo Diplomático del Siglo 21, con enfoque prospectivo, habilidad negociadora y énfasis promotor, capaz de posicionar los intereses nacionales en un mundo impredecible donde la Ley de Moore reconvierte la tecnología cada 18 meses, acelerando el paso hacia la Sociedad del Conocimiento.

César Huamanchumo Plasencia.

Es un reconocido economista, experto en economía de la innovación y negocios globales.

EMPRENDIMIENTO E INNOVACION EN LA  EPOCA INCAICA

Escribe: Lic. Walter Fernández Baca – Sevillano

Conferencista en temas de Planes de Negocios, Emprendimientos e Incubadoras de Negocios

El emprendimiento de los Incas se basaba en la agricultura, con lo cual se aseguraban el alimento, tanto individual como colectivamente. La producción era muy variada y los cultivos más importantes eran la papa y el maíz. Los incas aplicaron diferentes técnicas agrícolas que mejoraron el rendimiento de los cultivos. En pueblos cercanos a la costa utilizaron el guano como fertilizantes de las tierras. En la zona de la Sierra, utilizaron las grandes extensiones agrícolas, además de los andenes que eran laderas construidas en los cerros de nuestra serranía. Además, el dominio de pueblos lejanos al Cuzco que habitaban diferentes zonas les permitió obtener, mediante el pago de tributos, productos que no había en su propio hábitat.

El emprendimiento en el imperio incaico tuvo como base el aseguramiento de las existencias y alimentos de todo el pueblo sin ningún tipo de discriminación, por ello algunos ideólogos marxistas y marxistoides lo catalogaban como paradigma de los futuros estados socialistas, sin duda alguna, la organización económica incaica sigue causando  asombro en los tiempos actuales; por la simple razón de que la pobreza, el hambre, miseria, delincuencia y corrupción habrá existido pero en niveles mínimos.  

En ese sentido, una economía socialista es aquella en la que el Estado, en lugar de contentarse con una función arbitral, adquiere un lugar relevante y asume la iniciativa. En realidad fue la planificación estatal, disciplina e innovación;  el disparador de  la  clave del éxito en el imperio  Incaico. Los sistemas de regadío en la hoy árida costa los tambos o depósitos de alimentos para enfrentar adversidades, son prueba de ello.

Las técnicas agrícolas

Los Incas utilizaron la chaquitaclla (un largo palo provisto de otro en el que se apoyaba el pie para así hundir más el instrumento en la tierra), el empleo de guano (estiércol de animal en las tierras altas y pescado descompuesto, o bien guano de las aves que poblaban las zonas cercanas al mar, en las zonas costeras), también conocieron la irrigación artificial por medio de canales, acueductos y el cultivo en andenes para aprovechar hasta el máximo las tierras de los cerros, Los emprendedores agrícolas utilizaron terrenos planos y semi inclinados; de esto se desprende que esta cultura implemento acertadamente la innovación y creatividad, herramientas importantes de todo emprendedor.

Para mantener la enorme cantidad de tierras sembradas, los incas construyeron canales que hasta la actualidad lo siguen utilizando en las comunidades campesinas del Cuzco, por ello se desprende que existieron  ingenieros hidráulicos de excelencia para la época.

Sembraron, cosecharon y usaron el algodón para la confección de su vestimenta. En las tierras correspondientes a la selva alta, sembraron y cosechaban la “hoja sagrada”: la coca y otros alimentos que en la actualidad se han convertido en insumos gourmet de la cocina internacional.

 La ganadería Incaica

Esta modalidad de emprendimiento no era tan importante como la agricultura, que era un pilar básico en la economía del imperio. La llama se aprovechaba por su lana, larga y espesa, y como animal de carga (Resistía perfectamente la enrarecida atmósfera de las alturas andinas); las Vicuñas y alpacas eran apreciadas por su finísima lana, con las que se tejía las más bellas telas destinadas al Inca y a su séquito. Los rebaños, como la tierra, eran propiedades del estado y estaban divididos en tres categorías: del estado, de sacerdotes y pueblo. Cada comunidad emprendía con innovación y  poseía un cierto número de animales, perteneciente a cada categoría, que debía cuidar y atender y cuyos productos debía entregar al estado en su totalidad; de la parte correspondiente al pueblo. 

Pesca

Pescaban diversas especies de peces, Para cada tipo de pez usaron distintas redes, hechas ya sea de cabuya o de algodón generalmente teñidas para que no fueran detectadas por los peces. Poseían anzuelos de distintas formas y hechuras, de nasas y arpones. En la milenaria Cultura Caral (5,000 años de antigüedad) situado en plena Región Lima se han encontrado restos de moluscos que solo se reproducen en el Ecuador; pareciera que la navegación por alta mar ya era intensa.

El Ayllu

El ayllu era la comunidad de campesinos unido por vínculos familiares, que tenían antepasados en común y habitaban un mismo territorio. El Estado entregaba tierras a cada comunidad para su subsistencia. Anualmente, un funcionario local asignaba parcelas a cada familia según el número de sus componentes. Pero los campesinos no eran propietarios de las tierras y estas parcelas eran trabajadas colectivamente por todos los miembros de la comunidad. El ayllu o comunidad campesina debía entregar fuertes tributos en productos y en trabajo al Estado Inca y a los curacas. Las familias más numerosas, recibían mayor cantidad de apoyo otorgándoles grandes y mejores  tierras de cultivo.

Los propietario de las tierras en el Tahuantinsuyo era el estado que estaba representado por el inca quien las repartía con el fin de que sean trabajadas, cultivadas y recibir un tributo o usufructo. Cada año se precedía a repartir las tierras entre los ayllus.

El Trabajo

El emprendimiento colaboracionista en el imperio incaico se resumía en la siguiente frase: “El que no trabaja no come”

Tenía las siguientes características: 


Obligatoriedad: El trabajo era obligatorio para los habitantes del ayllu, solo era eximido de ello las personas  con discapacidad visual y motora o habilidades especiales

Equidad: Este principio indica que todos los individuos tenían los mismos derechos.

-Alternabilidad: Consiste en que no siempre se trabajaba en lo mismo, esto fue practicado contra el cansancio, aburrimiento o tedio que implicaba realizar las mismas labores 

El trabajo creo las bases para un fuerte emprendimiento y representó la principal actividad del imperio incaico y tuvo las siguientes formas: mita, minka y ayni.

La Mita, era un sistema de trabajo a favor del Estado Imperial del Tahuantinsuyo, donde se movilizaban multitudes de indígenas a trabajar por turno en labores de construcción de caminos, puentes, fortalezas, centros administrativos, templos, acueductos, explotación de minas, etc. Existía una mita para servicios especiales como las labores de cargueros del Sapa Inca, músicos, chasquis y danzantes, los obligados a cumplir esta labor eran los adultos hombres casados, más no las mujeres, comprendían entre los 18 y 50 años.

La Minca, Minka, o minga, es el trabajo que se realizaba en obras a favor del ayllu y del Sol (Inti), una especie de trabajo comunal en forma gratuita y por turno, era una forma de beneficio para el Estado, donde concurrían muchas familias portando sus propias herramientas, comidas y bebidas. Las familias emprendedoras incaicas participaban en la construcción de locales, canales de riego, así como la ayuda solidaria en la chacra de las personas incapacitadas huérfanos y ancianos. Cuando el ayllu convocaba al trabajo de la minca, nadie se negaba, pero las personas que no asistían al trabajo eran expulsados del ayllu y perdían su derecho a la tierra.

El Ayni, era un sistema de trabajo de reciprocidad familiar entre los miembros del ayllu, destinado a trabajos agrícolas y a las construcciones de casas. El ayni consistía en la ayuda de trabajos que hacía un grupo de personas a miembros de una familia, con la condición que esta correspondiera de igual forma cuando ellos la necesitaran, como dicen: «hoy por ti, mañana por mí y en retribución se servían comidas y bebidas durante los días que se realicen el trabajo. Esta tradición continúa en muchas comunidades campesinas,  ayudándose en las labores de cocina, pastoreo y construcción de viviendas. En la actualidad este método de ayuda solidaria  se sigue utilizando en nuestra sociedad, las llamadas polladas o cilindradas son una característica continua de este apoyo común.

Nota: La tierra que era para el pueblo estaba destinadas a los habitantes de los Ayllus y eran repartidas poniendo atención al número de personas que comprendía el Ayllu. A cada persona se le entregaba una porción de tierra que se denominaba TOPO (unos 2 700 m2) y a cada mujer se le daba medio TOPO. La tierra no se entregaba en propiedad sino tan solo en usufructo. Es decir el estado se encargaba de prestar el terreno a cambio de devolver una parte de la producción  realizada.

(Continúa)…

Conclusiones finales

  • Los incas fueron grandes emprendedores en el ámbito agrario, ganadero y otros.
  • Utilizaron la innovación y creatividad como herramientas básicas de emprendimiento.
  • El emprendimiento incaico no tenía fines de riqueza individual sino colectiva, por ello es considerada como una de las pocas culturas a nivel mundial donde no existía la pobreza y la diferenciación económica entre nobles y plebeyos.
  • La carga genética emprendedora de los peruanos tiene su origen en la cultura Pre incas y en la época Incaica. En la actualidad, el Perú, está considerado como uno de los países más emprendedores del mundo; en el 2007 estuvo en el primer lugar y en los últimos años ocupa los primeros lugares.
  • El emprendimiento en el imperio incaico tuvo como base el aseguramiento de los alimentos de todo el pueblo sin ningún tipo de discriminación, por ello algunos ideólogos marxistas lo catalogaban como paradigma de los futuros estados socialistas.
  • La organización económica incaica sigue causando asombro en los tiempos actuales; por la simple razón de que la miseria  no existía.
  • “El estado como administrador de todas las riquezas” esta premisa en mi concepto  no se puede implementar en la actualidad; por la simple razón de la descomposición moral y escasez de valores de nuestra sociedad en su conjunto.  

[1]De aquí en adelante ‘dólar’ en el artículo se refiere a la moneda de los EE.UU. Asimismo, el término “moneda vehículo” que se usa en el encabezamiento de este trabajo se traduce al inglés como ‘vehicle currency’, significado que se dilucidará más adelante en detalle.

[2]PNB se traduce al inglés como GNP, o gross national product, que refleja la suma de los bienes y servicios producidos en el país durante un año. En las cuentas nacionales de USA, el GNP es menor que el GDP, gross domestic product.

[3]Los países del G4 son los EE.UU., los (18) países de la euro zona, el Reino Unido (UK) y Japón.

[4] Véase  Alternatives Economiques  N° 72, Septiembre de 2007.

[5] En su última, sexta, reunión cumbre del 14-16 de julio de 2014 realizada en Fortaleza y Brasilia, Brasil, los BRICS han creado el Nuevo Banco de Desarrollo, NBD (con sede en Shangai, China, y una presidencia rotativa) con un capital autorizado inicial de US$50 billones que con apalancamiento financiero se convertirán en US$100 billones. Cada país miembro del G5 ha aportado inicialmente US$10 billones, aunque puede ser integrado por otros países como socios, permitiendo la diversificación de las fuentes de capital e inversiones en plazas, pero los BRICS mantendrán como mínimo 55% del capital o portafolio. El banco tiene por fines otorgar préstamos, dar garantías e incluso participar con capital en proyectos públicos de infraestructura  y/o privados, no sólo en el ámbito de los BRICS, sino a nivel global. El banco funcionará a partir de 2016. El Acuerdo Contingente de Reserva (ACR) por igual cantidad de capital complementa el NBD pata proteger los sistemas financieros de sus miembros de la volatilidad especulativa.

[6] También deletreado como seigniorage, también seignorage o seigneurage (del antiguo francés seigneuriage ‘derecho del Señor de acuñar dinero’), es la diferencia entre el valor del dinero y el costo de producirlo y distribuirlo. El seigniorage derivado del papel moneda es indirecto. En este caso, es la diferencia del monto entre los intereses ganados sobre los títulos valores  (securities) adquiridos al intercambiarlos por papel moneda circulante y el costo de producir y distribuir dicho papel moneda emitida y retenida y usada por el agente económico. Por ejemplo, cuando una moneda de colección acuñada por un banco central que cuesta cinco centavos producirla y distribuirla se vende por 25 centavos o más. Seigniorage es la ganancia hecha por el gobierno cuando alguien ‘compra’ una moneda.

[7] El actual presidente del banco central europeo es el italiano Mario Draghi.

[8] Su rendimiento actual a la fecha de 18 de julio de 2014, en los mercados financieros de New York, es 3.37%

[9] Véase la revista The Economist,  diciembre de 2007.

[10] Se debe notar que Argentina, con una tasa de inflación estimada del 25% para fines de 2014, devaluó su moneda en 19% en el mes de enero de 2014, siendo su tipo de cambio actualmente alrededor de 8p/1US$ (hoy está a 8.16 per dólar). El gobierno de argentina aplica actualmente una política de control de divisas y subsidios; sus RIN ascienden a US$28 billones mientras que las del Perú ascienden a cerca de US$60.5 billones.

[11] Véase cita del Prof.  Germán Alarco  de la Universidad del Pacífico en “’Paquete Castilla’ no resolverá desaceleración económica’, Diario Uno, 18 de julio de 2014, p. 12.

[12] El resto tendrá que ser financiada con la participación de la inversión privada y la inversión directa extranjera a través de  estrategias de “joint ventures”.

[13] Principalmente, títulos valores de la Secretaría del Tesoro de EE.UU., como también  MBSs  (morgage-backed securities) y bonos corporativos.

[14] En realidad, Bernanke tapered in diciembre de 2013 y en enero de 2014, cada mes en un monto igual a $10 billones, reduciendo el QE3 a $75 billones (el QE4 es similar al QE3, es por eso que al QE3 se le conoce también como “QE-Infinity”). En febrero de 2014, Janet Yellen, la sucesora de Bernanke en la Fed, contrajo el QE a $55 billones por mes.

[15] Por ejemplo, el rendimiento de las Notas del Tesoro a 10-años de EE.UU. subieron en un sólo día a 2.76% cuando se inició el 19 de marzo de 2014 el ‘tapering’ de Janet Yellen, quien reemplazó a Bernanke como presidente de la Fed el 1 de febrero de 2014.

[16] Para precisar, sólo 34% de los países menos desarrollados depreciaron sus tipos de cambio entre el 1 de abril y 28 de setiembre de 2013, 62% apreciaron sus tipos de cambio y sólo 4% no sufrieron variación alguna. Sin embargo, entre abril y setiembre de 2013, la excepción fue el rupí (rupee), la moneda de la india, que se depreció de una manera alarmante en 17%; la mayoría de las monedas de los mercados emergentes experimentaron apreciaciones durante dicho período. La explicación es que los mercados de divisas se integraron o funden alrededor de una interpretación benigna del “tapering”: que éste señalaba o significaba que era una ‘mejoría’ en los indicadores macroeconómicos de la economía de las EE.UU. y, por lo tanto, ello únicamente tendría que ser “bueno para el comercio global”. Ver “The taper disaster that wasn’t”, Free Exchange, The Economist, Londres, 16 enero 2014, estadísticas  tomadas de Global Economic Prospects del Banco Mundial, publicado en la misma fecha.

[17] Es decir, aquellos operadores e inversores que ‘’parquearon” sus dineros en países emergentes con altos ingresos no la han pasado muy bien, porque sus economías cuentan con,  relativamente hablando, con mercados financieros hondos (deep), lo que implica que posiblemente los financistas e inversores estaban más dispuestos o inclinados a mantener sus activos (físicos y financieros); y los que estaban inclinados o buscaban rebalancear sus carteras en estos mercados tenían la libertad, disponibilidad y confianza de moverlos off-shore o dejarlos dentro del sistema financiero con otro perfil (Uriarte, pp. 24-39).

[18] Véase J. Manuel Uriarte, El Efecto Tequila y los Mercados Emergentes de Capitales en América Latina.  Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Facultad de Economía, Unidad de Post Grado, Lima, Perú. 1996, capítulo III.

[19] El gobierno peruano invierte 3% anual de su PBI en infraestructura, cuando necesitaría invertir 8% por 10 años para alcanzar el nivel de desarrollo  de los países NICs del sudeste asiático. Véase sección “Economía”, diario La República, 8 julio 2014, Lima, p. 14.

Deja un comentario