1. Transitar de país extractivo a país de conocimiento

El Perú no debe limitarse a extraer y exportar minerales críticos, sino transformarlos en productos de alto valor tecnológico.
Objetivo 2035: desarrollar al menos tres polos nacionales de innovación minera-tecnológica, capaces de refinar, reciclar y diseñar materiales avanzados.

Acciones clave:

Crear un Programa Nacional de Materiales Estratégicos articulado entre MINEM, PRODUCE, MINEDU y CONCYTEC.

Incentivar la refinación y separación de tierras raras mediante inversión público-privada.

Integrar universidades (UNC, UNI, UNSA, UNMSM) en una Red de Investigación en Materiales Críticos para defensa, energía y tecnología.

2. Convertir la minería en plataforma de innovación verde

El futuro no está en más minas, sino en minas más inteligentes y sostenibles.
El Perú debe liderar en minería circular, reutilizando residuos y relaves como fuentes secundarias de tierras raras, reduciendo impacto ambiental y generando empleo tecnológico.

Objetivo 2035: convertir al Perú en referente regional de minería verde y circular, combinando eficiencia energética, inteligencia artificial y responsabilidad ambiental.

Ejemplo de acción:
Implementar un Centro Nacional de Economía Circular Minera en Cajamarca o Arequipa, vinculado un Instituto de Biotecnología Aplicada (INBIOTEC-UNC) y al Instituto Minero Ambiental.

3. Regionalizar la ciencia y la innovación

El desarrollo de los recursos críticos debe tener anclaje territorial, no concentrarse solo en Lima.
Cajamarca, Apurímac, Puno, Moquegua y Arequipa pueden transformarse en regiones laboratorio, donde confluyan universidades, empresas y gobiernos regionales bajo la figura de ecosistemas de innovación territorial.

Objetivo 2035: instaurar una Red Nacional de Laboratorios Territoriales de Innovación Minero-Energética, vinculada a los Parques Científicos y Tecnológicos Regionales.

Acciones:

Banco de Problemas del Territorio orientado a minería e innovación.

Fondos concursables de canon y regalías para proyectos de valor agregado regional.

4. Integrar ciencia, educación y soberanía tecnológica

El país necesita formar científicos, ingenieros y tecnólogos especializados en materiales, energía, robótica y automatización minera.
Debe incorporar Ciencia e Ingeniería de los Materiales Estratégicos del Perú en la red pública universitaria existente.

Objetivo 2035: formar 5 000 profesionales de alta especialización en materiales avanzados y 500 doctores en campos asociados a energía, biotecnología e inteligencia artificial aplicada.

5. Construir diplomacia tecnológica latinoamericana

El Perú debe asumir un rol articulador regional, impulsando una alianza latinoamericana de minerales críticos (Perú – Chile – Brasil – Bolivia – Argentina) bajo los principios de sostenibilidad y autonomía tecnológica.

Objetivo 2035: consolidar un Consorcio Latinoamericano de Minerales Estratégicos y Tecnología Sostenible, con sede en Cajamarca o Santiago, que promueva la investigación, la transferencia tecnológica y la negociación conjunta frente a potencias globales.

Síntesis de la Visión 2035

“El Perú será en 2035 un país que transforma sus recursos naturales en conocimiento, tecnología y bienestar territorial, liderando en América Latina una minería verde, inteligente y con valor agregado, basada en la soberanía científica y la cooperación internacional.”

Principios rectores

Soberanía tecnológica: no depender de cadenas extranjeras para el procesamiento.

Descentralización productiva: innovación anclada en los territorios.

Economía circular: convertir residuos en oportunidades.

Educación científica: formar talento local para no importar conocimiento.

Cooperación Sur-Sur: construir una voz latinoamericana en la gobernanza de los recursos estratégicos.